Page 130 - libro-timon-de-julio-resek
P. 130
. .
Es la del amor, al tocar al arroyo se partió en dos El grito dorado
fragmentos iguales de cuarzo rosa pálido.
Es una húmeda alborada y entre nubes por instantes
El Guardián, las tomó, las recargó al sol y me las los fotones pintan al Paraná y al Paraguay en un
entregó diciéndome: resplandeciente color dorado... Es temprano, mi
corazón galopa indomable porque hace tiempo
Entrégasela una a ella, la otra es para ti. Úsenla sutilmente te toqué, con la piel sedienta te toqué.
como colgante amuleto del amor, les ayudará a
curar las heridas del corazón. A todas mis caras, tus cabellos como rayitos de sol
acariciaron derritiéndome. Y tus miradas entre
nubes por instantes cómo fotones pintaron.
¿De dorado? Dibujándome sonrisas; pero el grito
dorado de tu inconfundible voz, una vez más hizo
correr mal mandado a mi corazón.
Es una húmeda alborada y entre nubes por instantes
los fotones pintan al Paraná y al Paraguay en un
resplandeciente color dorado que te hace ¿despertar
en mí?
130 131