Page 47 - libro-timon-de-julio-resek
P. 47

.                                                                                                          .





                                                 Vehemencias


                               Bajé al río calmo y estabas también. Las flores del
                               ceibo, del jacarandá pintaban amor en los estanques
                               junto a la luna reflejándose.


                               Bajé al río calmo y me pregunté: ¿de quién es?

                               Bajé al río calmo y comprendí: el río es usted mujer.

                               Valiente y pacifico río de amor, agitando las
                               vehementes energías empantanadas muy dentro de
                               mi ser.





























 46                                                   47
   42   43   44   45   46   47   48   49   50   51   52