Sin lugar a dudas considerar un factor como el de la iluminación, es fundamental para desarrollar proyectos más saludables. Los beneficios de desarrollar construcciones edilicias que utilizaran la mayor cantidad de luz natural posible, aporta beneficios en términos de salud para los usuarios de esos ambientes construidos; pero fundamentalmente significa importantes ahorros en inversión de energía, de electricidad para los propietarios. Pero además es necesario el diseño de proyectos que consideren las nuevas tecnologías tendientes al ahorro del consumo energético.
En ese sentido es importante destacar los avances en materia de desarrollo de nuevos sistemas lumínicos que nos enfrentaron primero al uso de las lámparas de bajo consumo que implicaron reducciones importantes en los costos por gastos de electricidad. Pero como la innovación no es patrimonio de nadie y todos de una u otra forma podemos aportar sugerencias y mejoras; del lado empresarial sucede lo mismo; con el aditamento que las empresas que invierten en desarrollo de nuevas e innovadoras tecnologías, encuentran un rápido retorno en ganancias de sus inversiones para trabajar en nuevos desarrollos.
El rediseño de un invento que databa de 1879, cuando Tomás Alba Edison exhibió públicamente su bombilla o lámpara incandescente que rápidamente fue adoptada en todo el mundo, es decir hace más de 130 años; significa un paso más que importante, ya que -para que tengamos una idea- el sistema del que hablamos hoy, tiene un gran potencial para reducir la cantidad de electricidad. A modo de ejemplo explican que de utilizarse en todos los EEUU implicaría bajar el consumo de electricidad en un 50% en todo ese territorio.
Estamos hablando de las lámparas de LED, una tecnología desarrollada por la multinacional Philips que está liderando la carga en la nueva revolución de la iluminación con sus bombillas hipereficientes. Visitar sitio de Philips sobre tendencias de iluminación con LED en este enlace
El LED, “Light Emitting Diode” es un semiconductor que genera luz al recibir electricidad. Desde hace varias décadas se utiliza exclusivamente en dispositivos electrónicos. En el 2000 comenzó a generalizarse su uso en edificios, espacios públicos y privados.
Ventajas. Los LED consumen entre un 70 y un 80 por ciento menos que sus equivalentes halógenos y duran 10 veces más. A diferencia de las lámparas de bajo consumo, no contienen mercurio. Por ahora, su gran contra es el costo, su precio es hasta seis veces más caro que las tecnologías convencionales; pero la universalización del consumo implicará aumentar su producción en cantidades que lo harán más económicas y accesibles.
Ya en la actualidad con la ampliación de la tecnología, el precio de las bombillas LED se ha reducido de 40 dólares en 2010 a sólo $ 10 con el uso de sólo 11 vatios de potencia en promedio en el mundo. Pero Philips apunta a algo más que la eficiencia energética.
La interactividad de los LED y sistema de “Hue” de Philip permite a los usuarios ajustar el color de la luz emitida para ciertos propósitos – como una alarma sutil para coger el tren – y se puede acceder y controlar a través de teléfonos inteligentes, desde cualquier lugar. Detrás de estas iniciativas, Philips vio sus ingresos del tercer trimestre aumenta un 267% en comparación con la que tenía en 2012.
La tecnología LED de Philips garantiza una vida útil de hasta 5 veces más que la iluminación convencional, lo que redunda también en la reducción de los costos de mantenimiento y reposición. Otro importante beneficio, es la posibilidad de controlar los sistemas lumínicos de forma remota. Philips desarrolló una solución basada en su plataforma de Telegestión Starsense, sistema que permite monitorear cada punto de luz de la red de manera individual. Algo que incluso, prometen, podrá hacerse desde un smartphone.
Y lo más importante, a diferencia de las bombillas incandescentes y las de bajo consumo, las lámparas de LEDs duran décadas. Muchas están clasificados para una vida de 20 años de uso o más, permitiendo además la programación de encendido, apagado y atenuación (dimerizado) de los niveles de iluminación según las necesidades específicas, lo que disminuye drásticamente el consumo de energía.
Sobre este tema del uso de sistemas lumínicos LED y la progresiva migración de las luminarias a este tipo de lámparas, en las construcciones emprendidas por parte de Constructora Resek, iremos ampliando en sucesivas notas.
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